Denunciar el maltrato ¿es el único camino?
Una de las principales cuestiones que abordan la lacra del maltrato es, sobre todo, cómo denunciar el maltrato. Tiene un gran sentido esto, porque hace una veintena de años, cuándo se empezó estudiar el maltrato (primero como violencia doméstica y después como violencia de género), es que el porcentaje de casos de personas maltratadas con respecto al porcentaje de denuncias era notablemente diferente.
Muchas personas sufren violencia en sus casas y nadie se entera.
Esto hizo que saltará la alarma y social y que fuera realmente importante concienciar a la población de la importancia que tenía la denuncia del maltrato.
Desde luego es la herramienta más valiosa con la que actualmente cuentan las víctimas del maltrato. Sin embargo no es la única.
En lo personal, como escritora que difunde información que pretende ser útil para personas maltratadaso en el entorno de la pareja, empiezo a entender que mi trabajo es más eficiente si enfoco todas mis energías en aportar a la víctima potencial herramientas que le ayude a defenderse de los maltratadores.
Y es que me he dado cuenta de que cuando una persona sufre vejaciones por alguien cerca de su entorno, bien sea su pareja, bien sea otro el lazo que le une a esta persona, una vez que ha conseguido alejarse del foco de la violencia (es decir de esa persona que le atormenta), vuelve aparecer otra en su vida y la pesadilla empieza de nuevo.
Desgraciadamente el elenco de personas tóxicas es amplio y variado. La población está plagada de personas desde psicópatas (que es la patología que más miedo nos da), hasta otras más fáciles de encontrar como por ejemplo el narcisismo.
Así que entendí que erradicar la toxicidad es una tarea imposible para mi puesto que implica herramientas relacionadas con la educación, la salud, la legislación y con otro tipo de instrumentos que se me escapan de las manos pero lo que sí puedo hacer es trabajar por el autofortalecimiento de los demás, aportar ideas para la autoliberación, dar herramientas para la autodefensa frente a todos estos tipos de personas tóxicas.
Por ese motivo existe el Curso de Defensa Emocional. Me parece una herramienta valiosísima para personas que necesitan dejar de encontrarse lobos en su camino, para aprender eficazmente a liberarse de los maltratadores, para, sobre todo, aprender a identificar la violencia emocional (también llamada violencia psicológica) con el fin de poder esquivarla.
Esta última, la IDENTIFICACIÓN DE LA VIOLENCIA, es la herramienta más importante para nuestras vidas porque somos víctimas y verdugos sin saber dónde están los límites del maltrato y por eso las víctimas permiten y los verdugos sobrepasan los límites una y otra vez.